Cuando al cineasta y embajador de LUMIX, Kyle Camarillo, le ofrecieron dirigir un proyecto para New Balance, protagonizado por la superestrella de la NBA Kawhi Leonard y el skater profesional Tiago Lemos, se le presentó un reto creativo único. La colaboración surgió de un cruce sorprendente: Lemos, un skater destacado, empezó a patinar con las zapatillas de baloncesto de Leonard, lo que generó interés en redes sociales. Intrigado por esto, Leonard contactó personalmente con Lemos, lo que generó una conexión entre ambos atletas y dio lugar a la creación de una colaboración especial con New Balance que fusiona la cultura del skate y el baloncesto. La tarea de Camarillo fue capturar este encuentro casual con un estilo documental auténtico.
Para llevar a cabo este proyecto, Camarillo necesitaba un equipo de producción versátil capaz de grabar diversas escenas de acción, desde trucos de skate hasta conversaciones entre Lemos y Leonard. Esto lo impulsó a incorporar la LUMIX GH7 como cámara C, junto con las ARRI ALEXA Mini LF y Mini para capturar imágenes inmersivas. El objetivo era simple: crear una representación orgánica del primer encuentro entre los atletas y mostrar la singular sinergia creativa entre el skate y el baloncesto.
Preproducción y configuración
Dado el enfoque documental del proyecto, Camarillo priorizó la flexibilidad y la movilidad durante el rodaje. Con un equipo reducido, que incluía dos operadores de cámara, una de sus principales preocupaciones eran las exigencias físicas de operar cámaras de cine más pesadas al capturar secuencias impredecibles de skateboarding. La ARRI ALEXA Mini LF , aunque esencial para su calidad cinematográfica, planteó algunos desafíos debido a su tamaño y peso, especialmente al rodar sobre una patineta o cuando los operadores de cámara de Camarillo necesitaban adaptarse rápidamente a la acción espontánea.
La LUMIX GH7 resultó ser increíblemente útil en este caso, gracias a una de sus nuevas funciones: la inclusión de ARRI LogC3 [con la compra de la clave de software LUMIX para ARRI LogC3 DMW-SFU3A ]. Capturar en LogC3 proporciona acceso a la extensa Biblioteca de Looks de ARRI, que incluye 87 looks distintos. Estos pueden compararse con diferentes tipos de película, cada uno ofreciendo una estética única y consistente al combinarse con las opciones de objetivos del director de fotografía.
La LUMIX GH7 con el objetivo LEICA ASPH 10-25 mm f1.7 de la serie G.
Camarillo tenía amplia experiencia grabando en V-Log con cámaras de la serie LUMIX GH y sabía que su diseño ligero facilitaría su manejo durante tomas complejas. Sin embargo, le interesaba especialmente la integración del flujo de trabajo de color de la GH7 con las cámaras ALEXA. "Incluí la GH7 a modo de prueba", explicó Camarillo, "porque tenía muchísima curiosidad por poder usarla como cámara C... usar la misma LUT ARRI LogC3 fue una decisión obvia".
Gracias a su pequeño tamaño y su flujo de trabajo profesional, la GH7 le permitió a Camarillo mantener la agilidad, especialmente al capturar imágenes complejas cámara en mano. Podía confiar en ella para tomas ojo de pez centradas en videos de skate y momentos que requerían ajustes rápidos, lo que le permitió centrarse más en la dirección y dejar las cámaras ALEXA más grandes a sus otros operadores.
"La GH7 se incluyó como una prueba, porque tenía muchísima curiosidad por poder usarla como cámara C... usar la misma LUT ARRI LogC3 fue una decisión obvia".
El cineasta Kyle Camarillo
Fotografía con la LUMIX GH7
La verdadera fuerza de la LUMIX GH7 se hizo evidente cuando Camarillo tuvo que alternar fluidamente entre la dirección y el manejo de su propia cámara. Dado que el proyecto seguía un estilo documental, no existía una lista de tomas estricta; en cambio, el equipo capturaba los momentos a medida que se desarrollaban. En muchas situaciones, Camarillo se vio en la necesidad de capturar tomas improvisadas que los demás operadores no podían, y ahí es donde la GH7 se volvió más valiosa.
“Podía ir mientras grababan algo importante, y si veía algo que no podía apartarlos de la vista, podía conectarme rápidamente con algo”, dijo Camarillo. La GH7 me brindó la flexibilidad para capturar momentos espontáneos sin interrumpir el flujo de la escena. Este enfoque manual, a menudo en patineta, le permitió a Camarillo sumergirse más en la acción.
Camarillo empleó un objetivo Canon 8-18 mm f/4 Fisheye junto con un Metabones Speedbooster XL para aportar energía y espontaneidad a su trabajo fotográfico. Para lograr un aspecto tradicional, optó por el objetivo LUMIX Serie G 10-25 mm f/1.7 ASPH Leica , destacando su robusta construcción y su apertura constante de f/1.7, que contribuían a lograr un aspecto más cinematográfico.
Calidad de imagen y coincidencia de colores con ALEXA
Una de las consideraciones más importantes para cualquier cineasta que utilice sistemas multicámara es la precisión con la que se alinea el metraje en postproducción. A Camarillo le sorprendió la precisión con la que se alineaba el metraje de la GH7 con el de la ALEXA, especialmente después de capturar en ARRI LogC3 y visualizar sus tomas en su monitor con una LUT ARRI 709.
A primera vista, Camarillo y su equipo quedaron impresionados con el rendimiento de la GH7. "Fue realmente genial... mostrárselo al técnico de imagen digital y a los demás operadores de cámara; estaban entusiasmados", recordó. La capacidad de la GH7 para grabar en ProRes 422 HQ con una resolución de 5.7K confirmó aún más que el material cumpliría con los estándares requeridos por la producción comercial de alta gama.
En cuanto a la edición, los archivos ProRes de la GH7 se integraron fluidamente con los de las cámaras ALEXA, a pesar de la diferencia de tamaño del sensor. Como señaló Camarillo: «La GH7 obviamente no es una cámara ARRI de fotograma completo como la Mini LF; es una cámara Micro Cuatro Tercios, pero en cuanto a la coincidencia de color, sin duda».
Estabilización de imagen y enfoque automático
Dado que la velocidad y la movilidad eran esenciales para Camarillo, el estabilizador de imagen integrado de la GH7 fue clave para garantizar tomas estables sobre una patineta. "Con solo acercar la cámara al ojo, es increíble ver lo fluida que se ve", explicó Camarillo. Esto le permitió moverse con fluidez en una toma sin depender de equipos de estabilización adicionales como estabilizadores o steadicams, que lo habrían ralentizado. A diferencia de la mayoría de las cámaras de cine profesionales, que carecen de estabilizador de imagen y enfoque automático, la GH7 le ofreció a Camarillo una mayor flexibilidad.
Camarillo también aprovechó el enfoque automático híbrido de fase mejorado de la GH7, especialmente en momentos en los que enfocar manualmente con un dispositivo de seguimiento de enfoque habría sido demasiado engorroso. En trucos de skate a alta velocidad, la GH7 le brindó una forma fiable de mantener a sus sujetos en movimiento nítidos con una configuración mínima.
Lecciones aprendidas
La experiencia de Camarillo con la GH7 demostró su versatilidad en entornos cinematográficos profesionales. Como director, apreció la libertad que le brindó la cámara durante una filmación estilo documental, permitiéndole participar en la acción y coordinarse con sus operadores.
También destacó que cuando la fatiga se apodera de la cámara, o cuando se requiere una toma rápida y ágil, la GH7 resulta ser una excelente cámara de respaldo o secundaria. "No tendrás ninguno de esos problemas gracias a su pequeño tamaño", afirmó.
Según Camarillo, la LUMIX GH7 fue fundamental en la producción de New Balance. Su capacidad para reproducir imágenes con cámaras ARRI, junto con su portabilidad y facilidad de uso, la convierte en una herramienta potente para cineastas que buscan una opción ligera pero eficaz en entornos de grabación impredecibles con una calidad de imagen profesional.
